Dios es el centro de nuestra adoración y queremos alabarle con todo nuestro ser. Por eso, nuestro trabajo es asistir a nuestra congregación en esta comunicación a través de la música.

Juan 4:23-24
Dios es espíritu, y los que le adoran deben ser guiados por el Espíritu para que le adoren como se debe. Se acerca el tiempo en que los que le adoran a Dios el Padre, lo harán como se debe, guiados por el Espíritu, porque el padre quiere ser adorado así. ¡Y ese tiempo ya ha llegado!

Nuestro deber es servir por medio de los talentos que Dios nos ha dado a cada uno. Los músicos son voluntarios de nuestra iglesia, comprometidos a cantar un cántico nuevo, haciéndolo bien, tañendo con júbilo como lo indica en Salmos 33:3.

Si estás interesado en servir en este ministerio llámanos a nuestra oficina al 714.455.4201.